Naltrexona: Tratamiento Médico para Dejar el Alcohol
La naltrexona es un fármaco aprobado por las autoridades sanitarias para el tratamiento del trastorno por consumo de alcohol. Pertenece a la clase de antagonistas opioides y actúa reduciendo el deseo de consumir alcohol y la gratificación asociada a su ingesta. Su uso forma parte de un abordaje integral que incluye terapia psicológica y seguimiento médico especializado. Está indicado en pacientes con dependencia alcohólica que buscan alcanzar la abstinencia o reducir significativamente su consumo.
Características
- Principio activo: clorhidrato de naltrexona
- Presentación: comprimidos recubiertos de 50 mg
- Administración: oral, una vez al día
- Requiere prescripción médica
- No crea dependencia física
- Compatible con programas de terapia conductual
Beneficios
- Reduce significativamente los episodios de consumo excesivo de alcohol
- Disminuye la intensidad de los pensamientos obsesivos relacionados con la bebida
- Ayuda a mantener periodos prolongados de abstinencia
- Mejora la adherencia a los programas de tratamiento integral
- Facilita la participación en terapias psicológicas complementarias
- Contribuye a la normalización de los neurotransmisores cerebrales afectados por el alcohol
Uso habitual
La naltrexona está indicada como parte de un programa de tratamiento integral para la dependencia del alcohol en adultos. Se utiliza tanto para lograr la abstinencia completa como para reducir el consumo en pacientes que no pueden o no desean dejar de beber completamente. El tratamiento suele iniciarse después de la desintoxicación médica, cuando el paciente ya no presenta síntomas de abstinencia aguda. La duración del tratamiento varía según la evolución clínica, oscilando generalmente entre 3 y 12 meses.
Posología y administración
La dosis recomendada es de 50 mg una vez al día, preferentemente por la mañana. Puede administrarse con o sin alimentos. El tratamiento debe iniciarse bajo supervisión médica después de confirmar que el paciente no presenta hepatopatía aguda o insuficiencia hepática. En pacientes con afectación hepática leve o moderada, puede considerarse una dosis inicial de 25 mg/día. No se recomienda su uso en insuficiencia hepática grave.
Precauciones
Antes de iniciar el tratamiento, debe realizarse una evaluación completa de la función hepática. Los pacientes deben ser advertidos sobre la posibilidad de desarrollar hepatotoxicidad, aunque es infrecuente con las dosis terapéuticas. Se recomienda monitorización periódica de transaminasas durante el tratamiento. Los pacientes deben abstenerse de consumir alcohol durante el tratamiento, ya que la naltrexona no protege contra los efectos intoxicantes del alcohol ni previene las complicaciones asociadas a su consumo.
Contraindicaciones
- Insuficiencia hepática aguda o hepatitis aguda
- Hipersensibilidad conocida a la naltrexona
- Tratamiento concomitante con opioides
- Abstinencia aguda de opioides no resuelta
- Embarazo y lactancia (excepto cuando el beneficio justifique el riesgo)
- Insuficiencia renal grave
Efectos secundarios posibles
Los efectos adversos más frecuentes incluyen náuseas (10%), cefalea (7%), mareos (4%), insomnio (3%) y ansiedad (2%). Menos frecuentemente pueden presentarse vómitos, somnolencia, astenia y dolor abdominal. Generalmente estos efectos son leves y transitorios, desapareciendo durante las primeras semanas de tratamiento. Raramente se han reportado casos de elevación de enzimas hepáticas, depresión y reacciones cutáneas.
Interacciones medicamentosas
La naltrexona puede potenciar los efectos sedantes de otros fármacos del sistema nervioso central. Está contraindicado su uso concomitante con opioides, ya que bloquea sus efectos analgésicos y puede precipitar un síndrome de abstinencia. Puede interactuar con fármacos hepatotóxicos, aumentando el riesgo de daño hepático. Se recomienda precaución con antidepresivos, ansiolíticos y otros psicofármacos.
Dosis olvidada
Si se olvida una dosis, debe tomarse tan pronto como se recuerde, siempre que no esté próxima la hora de la siguiente dosis. En ese caso, debe omitirse la dosis olvidada y continuar con el horario habitual. Nunca duplicar la dosis para compensar la olvidada. La eficacia del tratamiento puede verse comprometida si se omiten dosis de forma repetida.
Sobredosis
En caso de sobredosis, que se manifiesta con náuseas, vómitos, somnolencia y afectación hepática, se debe buscar atención médica inmediata. El tratamiento es sintomático y de soporte. No existe antídoto específico. La hemodiálisis no es efectiva para eliminar la naltrexona debido a su elevado volumen de distribución y unión proteica.
Almacenamiento
Conservar en su envase original, protegido de la luz y la humedad, a temperatura ambiente (15-30°C). Mantener fuera del alcance de los niños. No utilizar después de la fecha de caducidad indicada en el envase. Desechar adecuadamente los comprimidos sobrantes una vez finalizado el tratamiento.
Advertencia legal
Este medicamento requiere prescripción médica y debe utilizarse exclusivamente bajo supervisión de un profesional sanitario cualificado. La información proporcionada tiene carácter informativo y no sustituye el consejo médico profesional. Los resultados del tratamiento pueden variar según cada paciente. El uso inadecuado del medicamento puede ser perjudicial para la salud.
Experiencias clínicas
Los estudios controlados demuestran que la naltrexona reduce en aproximadamente 50% el riesgo de recaída en el consumo de alcohol compareddo con placebo. Los pacientes tratados con naltrexona presentan significativamente menos episodios de consumo intensivo y periodos más prolongados de abstinencia. La combinación con terapia conductual muestra los mejores resultados a largo plazo. La tolerabilidad general es buena, con persistencia en el tratamiento superior al 70% a los 6 meses.